Wi Tei, Chin Pó y el agua de azahar: Marlowe que intenta aprender.

Éste es un post (-rock) experimental. Voy a tratar de que tú, querido biolector, entiendas el verdadero poder metal del biofrutismo. Un poder que es capaz de hacer que cada lector acabe el post con la misma palabra en su cabeza, es como cuando algún día se alineen todos los astros, como cuando tu pareja y tú tenéis esos espasmos al mismo tiempo cuando sois solo uno. Como cuando Iniesta metió el gol y todos en el bar os abrazasteis al unísono.

Las mejores cosas de la vida pasan cuando estas esperando a la ropa de la lavadora. Ha sido en ese momento que he tenido conocimiento del sueño Marlowístico de nuestro compañero Dry. La verdad es que, tras esta revelación, me siento más seguro a la hora de escribir lo que ayer también me pasó pues para tratar de resolver mi problema, intenté inspirarme en qué habrían hecho los sabios Wi Tei y su discípulo Chin Po.

Debe ser el contacto de las almas cándidas biofrutiles, nuestro cordón um-bio-lical, que no importa cuantas horas de avión (más si te vas al aeropuerto de Rallaner) nos separen, nos hace a los bios ser un néctar concentrado y light al mismo tiempo, tope vitamínico.

Pues manos a la ubre:

Me lo imaginé como en una especie de corto filmado en super8, allí estaban las enseñanzas de nuestra querida pareja de budistas, Wi Tei, Chin Po y el lobo Sebastián al que normalmente en el huerto de Naranjos del Infante no le dejan pasar por si levanta la patita para "regar". La conversación fué tal que así:



Chin Po (aka CP): Maestro Wi Tei, no logro tener paciencia en esta vida.


Wi Tei se quedó de piedra, es un ejercicio que han practicado mucho y CP tiene ya pelicos en los huevos como para haber aprendido la lección. Pero Wi Tei paciencia tiene mucha y entiende las preocupaciones de su discípulo, ya que él mismo fue instruido una vez del gran Tir Chan, maestro de maestros. Lo que más le sorprende es que le haga esta confesión justo en el momento en que están recogiendo las hojas de naranjo para elaborar el agua de azahar embotellada con la que se pagan los pequeños placeres, ahora que les han recortado el sueldo a ellos también y reducido las perras para actividades extraescolares.

Wi Tei (aka WT): ¿Qué par de tetas son esta vez CP?

CP: Maestro, no logro concentrarme en mis obligaciones diarias. No veo con claridad. Es un quiero y no puedo. Sólo pienso en ella. Imparte clase en un centro de lenguas modernas a 2000 km y nos mandamos mensajes secretos por el iphone4 que no le he enseñado maestro por miedo a su desaprobación.

WT: Pero me cago en la madre que te parió, ¿tú también tienes un iphone4, no has aprendido nada de no picar la manzana?

CP: No, no, maestro, no se confunda. Los principios que me inculca los grabo a fuego en mí, yo utilizo sólo mi antiguo Toshiba (se dice que el fundador de la marca fue también compañero de estudios de WT).

WT: Continúa pájaro.

CP: Pues eso maestro, que ella me ha soltado unas 3 o 4 perlas como que el del videoclub de ficciones está mucho más amable con ella, que el fin de semana en Londres unos cuantos ingleses echaos palante querían ligar con ella, o que ha estado hablando con el del grupo ese que come chochos como al que le pasan un cubata (algún día escribiremos un post sobre esto). Que creo que me las suelta como para ponerme un poco celosín.

WT: es posible, pero tú la tienes más grande que ése del grupo seguro. Por eso no te preocupes CP.

CP: ya, pero es que es el cantante.


WT: ya, pero es que todas las chicas saben que el que más aguanta en la cama es siempre el batería, es el más apto físicamente. Vuelve a la historia y déjate de sexo ahora, hablamos de amor.


CP: Y ayer en uno de nuestros intercambios de emails, pensé entender que me pedía un poco más. Creí que mi deber era recordarle las circunstancias que hacen muy difícil una relación entre los 2. Ayer el juego volvió un poco y por una tontería sin importancia y cuando le dije que yo también había hecho lo mismo que ella (ponerla en el escritorio de mi Toshiba), me dijo que no me creía. Que era una de mis habituales subidas de tono para hacerla caer y luego recordarle cual era mi situación otra vez y bla bla bla. No la culpo maestro, ella es una chica que merece ser querida y mucho, y bien sabe usted maestro que a mí una vez cuando fuí al super, de lo adorable que soy,  me confundieron con el osito de Mimosín y me querían pasar por el código de barras pensando que era un suavizante. No sé maestro.



WT: Querido Chin Po, hace tiempo que no me dejaban así, en completo fuera de juego.


Y una botella entera de agua de azahar recién destilada descendió por el gaznate de Wi Tei que se retiró a analizar lo sucedido, optando esta vez por la postura de la chirimoya, que es la misma que la típica del loto pero con las manos agarrándote la _ _ _ _ _.


Gracias por leer y, si quieren, por comentar.