Menta extra fuerte, la cúspide del sabor Marlowiano

Hace un rato he salido a darme una vuelta y a aprovechar y sacar al perro que vive dentro de mí. He dejado la ropa en la secadora común del edificio y así a la vuelta, en 20 min o así la recojo.

Pues bien, me había puesto a enjuagarme la boca con colutorio y he decidido que por qué esperar y esputar en el lavabo, que qué pijos, lo hago ya en el jardíncito que tengo a la vuelta de la esquina.

Claro, que la moral de Chin Pó me ha castigado. Bajaba por las escaleras y me he visto de frente al abrir con una de nuestras vecinas. De 14 apartamentos, por qué las chicas? ¿Por qué ha hablado conmigo? ¿Por qué me ha hecho esa pregunta?

Tenía dos opciones, esputar tan burbujeante líquido ahí en medio, tragármelo o una tercera, quedarme callado...

Ahora creo que me voy a morir porque sabía a ratas y encima había cambiado y me había echado el de sabor de menta extra fuerte