Un viejo monje sentado en el centro de una austera habitación. Parece hablar solo, pero el observador avezado notará la cara atenta de un despeluchado lobo gris que yace a sus pies. Dice Wi Tei:
- El joven Chin Po es impulsivo e irresponsable a veces, querido Sebastián,... ajá, ¿asientes, eh? ...Tú ya te habías dado cuenta, claro... pero también te habrás dado cuenta, amigo lobo, de que algo sí que ha aprendido en su estancia en el monasterio... ¿verdad? Oh,... venga... admítelo.... Ajá, así me gusta... Chin Po... Chin Po no es tan tonto como parece... Es verdad que a veces sus silencios denotan una nula actividad cerebral... pero otras veces se ve en su mirada algo diferente... como si se estuviera haciendo dueño y señor de sus silencios... como tú, viejo lobo...
El lobo se incorpora y ronronea alrededor de las piernas del maestro. El maestro mira la Luna. La paz se derrama por el suelo, el viejo estanque los rodea, el nirvana está cerca...
De repente se abre la puerta y aparece Chin Po con el portátil en una mano. Se pone delante del maestro y tendiéndoselo abierto, le dice:
- Maestro!... el culo de Scarlett Johansonn!!! Por fin!!!
Wi Tei acaricia a lobo y tras cruzar con él una mirada de complicidad, se acerca y le susurra muy flojito: "¿ves lo que te decía?". Y entonces, se vuelve hacia Chin Po y le contesta con solemnidad:
- Madre mía, qué culazo
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