miércoles, 24 de junio de 2009

FUEGO A DISCRECIÓN, por Mr Dry




“Mire, doctor, …le voy a contar, …no sé qué me pasa, qué tengo… no sé, siento una especie de rabia, …bueno, mire, qué demonios, …odio a mi mujer, …odio a mi padre, odio a mis hijos, a mis compañeros, …me odio a mí mismo, le odio a usté,...
-Pero bueno! y a mí qué me cuenta!
-Pero… ¿no es usted el médico del odio?
- No, del odio no, del OÍDO,…O-Í-DO”

Seguro que alguna vez han ido a buscar algo al sitio equivocado, pues eso es lo que le ha pasado al señor del chiste y al que esto teclea.
Saluden al nuevo director gerente de Kagada Corporation Spain

3 comentarios:

  1. Estimado Mr. Dryfer,

    ejerciendo de ardillica tierna comedora de avellanas por el bosque te digo:
    las cagadas verdaderas, las cagadas gordas son las que hacen daño a los demás, a las personas que quieres. En su ausencia, también son consideradas diarreas totales las que uno hace con mala intención, mala leche vamos.

    Por tus post femeninos, te conoceremos y por tus post femeninos te adoraremos. Esto en el país de las ardillas significa que la cagada (me niego a esckribirlo con k) corporation debe haber sido por una persona del género opuesto...

    Mr. Dry, seguro que no ha sido para tanto. Además, ¿cómo sabes que ella lo ha tomado por una cagada? Seguramente no le ha dado tantas vueltas.

    Por ejemplo, tú le dices a una chica que está muy morena y realmente a los diez minutos se le ha pasado y deja de pensar que Marlowe es un gilipollas.

    Bueno, quizás 20 minutos

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  2. cagada es lo siguiente:

    le he visto a una compañera de curro una mancha en el pantalón. hA venido a mi despacho a hacerme unas consultas con un pantalón blanco de lino. Al irse por la puerta le he visto una mancha "marrón".

    Le digo que lleva una mancha en el culo?
    entonces sabrá que le he mirado el culo. Se molestará? si? no?
    Si no le digo nada, seguro que luego me dice que se lo tenía que haber dicho...

    en fin, que paso y me pongo a leer biofrutismo

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  3. ¡¡¡Qué grande el cartel!!!!
    Yo al médico del odio lo llamo psiquiatra, y mañana me toca verlo de nuevo. Volverá a mandarme unas pastillas que volveré a NO tomar. Así me va. Pero qué grande el cartel, qué grande.
    Voy a empaparme de este blog, que mestá gustando

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