Umberto Eco sobre la película Casablanca:
Una nota discordante proviene de la pluma de Umberto Eco, al afirmar que «desde un punto de vista estrictamente crítico... Casablanca es una película muy mediocre». Eco objeta que los cambios en los personajes devienen inconsistentemente, más que como resultado de un proceso complejo: «Es una tira cómica, un sancocho, carente de credibilidad psicológica y con escasa continuidad en cuanto a efectos dramáticos». De todas maneras, concluye, es esta inconsistencia lo que vale para que el filme sea tan aceptado pues permite incluir una larga serie de arquetipos: el amor desgraciado, el vuelo, el rito de paso, la espera, el deseo, el triunfo de la pureza, el siervo fiel, el triángulo amoroso,la bella y la bestia, la mujer enigmática, el aventurero ambiguo y el borracho redimido. Se centra principalmente en la idea de sacrificio: «el mito del sacrificio atraviesa toda la trama del filme».
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A veces -me dijo mi amigo-, queriendo parecerse uno a Bogart en Casablanca, acaba pareciéndose al teniente Frank Drebin en Agárralo Como Puedas.
Recordando a Borges ("la realidad no tiene la obligación de ser interesante, pero sí las hipótesis que nos hagamos de ella"), yo le respondí que lo importante entonces es mantenerse en el papel el mayor tiempo posible.
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les aseguro por el honor de francisco camps, que en offsidia les leemos con rigurosa asiduidad y que hasta tomamos apuntes, y que si no comentamos ni posteamos es porque estamos pasando un época rara: algo hormonal, algo existencial, algo de macramé.
ResponderEliminarquerida pola, podría decir alguna tontá, pero lo cierto es que las echamos de menos.
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